Ya hay mandarinas en el mercado, así que desayuno con mi jugo favorito. Hoy, además, compré zapotes negros y preparé un dulce con ellos. Y ya es buen clima para sopas. Estoy pasando por una fase de puras cremas: de espárragos, de jitomate asado, de calabacitas. Y hoy, de champiñones.
Y sí, entre exprimir, picar, freír y licuar voy a trabajar. Esta semana, por ejemplo, asistí por primera vez a un seminario sobre la historia de la ciencia vista desde sus instrumentos. Es una perspectiva muy interesante por sí misma, pero además creo que me servirá mucho para analizar de una manera coherente el periodo del inicio del Observatorio, en que se adquirieron muchos intrumentos nuevos.
Además, asistí al examen profesional de mi estudiante Javier. Se recibió con una linda tesis sobre la astronomía en la prensa mexicana en la década de los 20's del siglo pasado. Combinando trabajo en hemeroteca con revisión del contexto que rodeaba al Observatorio en esos años, muestra cómo el director de entonces -Joaquín Gallo- recurre a la divulgación de la astronomía a través de la prensa como otra vía más para obtener la validación social que tanto necesitaban entonces.
Mientras tanto, el trabajo con Liliana de organización de los archivos que se encuentran en el Instuto de Astronomía siguie viento en popa. Hace un par de semanas dimos un coloquio en el Instituto y tuvimos muy buena respuesta de la comunidad. Además, hemos descubierto cosas muy interesantes en el archivo personal de Arcadio Poveda, quien amablemente nos permitió revisarlo y hemos decidido que lo vamos a organizar.
Como ves, muchas cosas buenas.