Me recomendaron un sitio que está verdaderamente genial. Se trata del blog que escribe una planta de calabaza que nació y creció en la Estación Espacial Internacional.
Me encanta porque lleva al extremo la narrativa interior desde el punto de vista de un personaje: en este caso, un simpático vegetal. De paso, nos muestra algo de la vida de los demás habitantes de la estación.
sábado, 14 de abril de 2012
miércoles, 21 de marzo de 2012
Tapar el Sol con un dedo
En el siglo XIX fueron muy comunes las expediciones para observar eclipses de Sol. Sin importar en qué parte del planeta fueran visibles, grupos de hombres (y a veces también mujeres), equipados con una variedad de aparatosos instrumentos, se desplazaban en los azarozos medios de transporte de entonces para poder presenciar este importante fenómeno.
La medición del instante de contacto entre la Luna y el Sol servía para precisar la órbita de la Luna y con esto entender mejor el Sistema Solar. Esto se lograba mediante un complicado trabajo en equipo que no dejaba mucho tiempo para observar otras cosas.
Sin embargo, durante el eclipse de 1842 que se pudo observar en Europa central, el británico Francis Baily dedicó su atención a la corona, y a las curiosas perlas de luz observables justo antes o después de la totalidad. A partir de ese momento, la corona se volvió otro tema de interés durante los eclipses. Los estudiosos de la corona esperaban ansiosos a que los dos astros más grandes en el cielo se volvieran a unir para poder seguir aprendiendo sobre esta atmósfera tan especial del Sol.
En 1930 las expediciones para observar eclipses totales de Sol se volvieron innecesarias cuando el francés Bernard Lyot inventó el coronógrafo. Este sencillo dispositivo consiste, más o menos como en el dicho, en tapar al Sol con un dedo. Se inserta un disco opaco en el sistema óptico del telescopio de tal modo que el Sol queda tapado y se puede observar la corona.
Gracias a este ingenioso invento se pudo avanzar a pasos agigantados en la comprensión de la corona. Tristemente las maravillosas expediciones se volvieron obsoletas.
La medición del instante de contacto entre la Luna y el Sol servía para precisar la órbita de la Luna y con esto entender mejor el Sistema Solar. Esto se lograba mediante un complicado trabajo en equipo que no dejaba mucho tiempo para observar otras cosas.
Sin embargo, durante el eclipse de 1842 que se pudo observar en Europa central, el británico Francis Baily dedicó su atención a la corona, y a las curiosas perlas de luz observables justo antes o después de la totalidad. A partir de ese momento, la corona se volvió otro tema de interés durante los eclipses. Los estudiosos de la corona esperaban ansiosos a que los dos astros más grandes en el cielo se volvieran a unir para poder seguir aprendiendo sobre esta atmósfera tan especial del Sol.
En 1930 las expediciones para observar eclipses totales de Sol se volvieron innecesarias cuando el francés Bernard Lyot inventó el coronógrafo. Este sencillo dispositivo consiste, más o menos como en el dicho, en tapar al Sol con un dedo. Se inserta un disco opaco en el sistema óptico del telescopio de tal modo que el Sol queda tapado y se puede observar la corona.
Gracias a este ingenioso invento se pudo avanzar a pasos agigantados en la comprensión de la corona. Tristemente las maravillosas expediciones se volvieron obsoletas.
martes, 3 de enero de 2012
Conejo radiofónico
Me acabo de dar cuenta de que: ¡ya comenzó mi nueva serie sobre astronomía y cultura en Radio México Internacional!
Se llama El conejo en la luna que saldrá en vivo lunes, miércoles y viernes a las 8:05 am, 16:40 pm y 22:55 pm. Además puedes escuchar las cápsulas anteriores y, muy importante, dejar comentarios, en la página de la serie.
Se llama El conejo en la luna que saldrá en vivo lunes, miércoles y viernes a las 8:05 am, 16:40 pm y 22:55 pm. Además puedes escuchar las cápsulas anteriores y, muy importante, dejar comentarios, en la página de la serie.
viernes, 16 de diciembre de 2011
Un artista eclipsado
Estoy empezando un tema nuevo de investigación. Es algo a lo que le tengo ganas desde hace tiempo, pero nomás no había podido llegar a ello. Se trata del eclipse total de sol de 1923, que sólo pudo ser observado en México.
Lo primero que hice fue revisar los documentos sobre este eclipse que se encuentran en el Fondo Observatorio Astronómico Nacional (FOAN). Aunque desafortunadamente no están muy completos, hay muchísimas pistas, hilos que puedo empezar a jalar para conocer bien cómo fue.
Entre los documentos que encontré están dos cartas del Dr. Atl. Ya te había platicado de su carta de 1940 sobre su teoría de las espirales en el universo. Bueno, pues estas son de 1923, y hablan de su próxima participación en la expedición del Observatorio a Yerbanís, Durango para observar y registrar el eclipse.
Las cartas vienen de Acapulco donde, al parecer, dirigía Acción Mundial, el diario de la tarde. Aunque no tenemos las respuestas de Gallo, se entiende que éste lo ha nombrado el artista de la expedición, tarea que se tomó muy en serio. Envía reportes detallados de su revisión de las maneras en que se han retratado los eclipses de sol hasta entonces. Las analiza y encuentra que tienen algunos problemas, de modo que propone un nuevo método. Aún no sé si el Dr. Atl llegó a Yerbanís e hizo los dibujos, pero seguiré buscando.
Se atraviesan las vacaciones y todos los archivos históricos estarán cerrados. Pero tal vez pueda averiguar algo más cuando vaya a la exposición sobre el artista que acaban de inaugurar en el Centro Cultural Tlatelolco.
Lo primero que hice fue revisar los documentos sobre este eclipse que se encuentran en el Fondo Observatorio Astronómico Nacional (FOAN). Aunque desafortunadamente no están muy completos, hay muchísimas pistas, hilos que puedo empezar a jalar para conocer bien cómo fue.
Entre los documentos que encontré están dos cartas del Dr. Atl. Ya te había platicado de su carta de 1940 sobre su teoría de las espirales en el universo. Bueno, pues estas son de 1923, y hablan de su próxima participación en la expedición del Observatorio a Yerbanís, Durango para observar y registrar el eclipse.
Las cartas vienen de Acapulco donde, al parecer, dirigía Acción Mundial, el diario de la tarde. Aunque no tenemos las respuestas de Gallo, se entiende que éste lo ha nombrado el artista de la expedición, tarea que se tomó muy en serio. Envía reportes detallados de su revisión de las maneras en que se han retratado los eclipses de sol hasta entonces. Las analiza y encuentra que tienen algunos problemas, de modo que propone un nuevo método. Aún no sé si el Dr. Atl llegó a Yerbanís e hizo los dibujos, pero seguiré buscando.
Se atraviesan las vacaciones y todos los archivos históricos estarán cerrados. Pero tal vez pueda averiguar algo más cuando vaya a la exposición sobre el artista que acaban de inaugurar en el Centro Cultural Tlatelolco.
lunes, 21 de noviembre de 2011
Un reto
Este año la noche de las estrellas incluye un reto: se trata de romper el record del número de personas apuntando un telescopio al mismo objeto celeste. El eventó será el próximo sábado 3 de diciembre a partir de las 8pm.
Si quieres saber más, visita la página de la Noche de las estrellas.
Si quieres saber más, visita la página de la Noche de las estrellas.
miércoles, 2 de noviembre de 2011
Itinerario
A unos días de zarpar para Chile, te comparto el calendario de las conferencias que daré alla:
Lunes 7
Museo de la Educación Gabriela Mistral
Charla: Otros mundos en la luna
Martes 8
Observatorio Cerro Calán
Charla: Un planeta mexicano
Miércoles 9
Feria Internacional del Libro de Santiago
Charla: Galileo astrónomo
Jueves 10
Universidad Católica
Charla: Otros mundos en la luna (versión para adultos)
Como ves, me tocará hablar con públicos muy diversos y eso seguramente será bien interesante.
Lunes 7
Museo de la Educación Gabriela Mistral
Charla: Otros mundos en la luna
Martes 8
Observatorio Cerro Calán
Charla: Un planeta mexicano
Miércoles 9
Feria Internacional del Libro de Santiago
Charla: Galileo astrónomo
Jueves 10
Universidad Católica
Charla: Otros mundos en la luna (versión para adultos)
Como ves, me tocará hablar con públicos muy diversos y eso seguramente será bien interesante.
viernes, 28 de octubre de 2011
Un planeta mexicano
En el ejemplar de noviembre de la revista ¿Cómo ves? viene un artículo que hice sobre el descubrimiento de un planeta por astrónomos mexicanos. Te pongo la primera página, ¡a ver si se te antoja!
viernes, 30 de septiembre de 2011
Doble doctor
La semana pasada la UNAM le otorgó el grado de Doctor Honoris Causa al astrónomo Manuel Peimbert. Además de la ceremonia en Consejo Universitario, hubo un homenaje en el Instituto de Astronomía anteayer.
De pura casualidad, el día anterior Liliana encontró esta foto entre los documentos que estamos organizando en el Instituto. Fue tomada en hace 51 años, en la 106 reunión de la American Astronomical Society que se llevó a cabo en México. Afortunadamente la pude digitalizar a tiempo para que Rafael Costero la incluyera en su plática.
Creo que no hace falta decir cuál es Manuel, ¿verdad? La mujer junto a él es Silvia Torres. No sé si entonces ya estaban casados.
De pura casualidad, el día anterior Liliana encontró esta foto entre los documentos que estamos organizando en el Instituto. Fue tomada en hace 51 años, en la 106 reunión de la American Astronomical Society que se llevó a cabo en México. Afortunadamente la pude digitalizar a tiempo para que Rafael Costero la incluyera en su plática.
Creo que no hace falta decir cuál es Manuel, ¿verdad? La mujer junto a él es Silvia Torres. No sé si entonces ya estaban casados.
viernes, 9 de septiembre de 2011
Sirve
Esta semana constaté con una gran satisfacción que, tal y como debe ser, mi trabajo de ya casi cuatro años en la organización del Fondo Observatorio Astronómico Nacional (FOAN) les puede servir a otros.
Hace unos días me escribió Héctor Mendoza, historiador de la geografía, diciendo:
Hace unos días me escribió Héctor Mendoza, historiador de la geografía, diciendo:
Debo integrar una breve semblanza para el próximo 19 de septiembre, cuando se inaugura la "plaza" Valentín Gama afuera del edificio del Instituto de Geografía. Ese día acude el Rector y se presenta el libro: Un siglo de la Universidad Nacional de México 1910 – 2010. Sus huellas en el espacio a través del tiempo, acto al cual estás cordialmente invitada a las18:00 hrs.y aunque todavía no terminamos la organización, con pocas indicaciones pude orientarlo para que encuentre lo que ahí tenemos de este ingeniero geógrafo que fue el tercer director del Observatorio.
jueves, 1 de septiembre de 2011
Observar, experimentar
La semana pasada me llegó por correo un lindo paquete. Contenía tres libros. Uno enorme para mi padre con los crucigramas del domingo (que son los más difíciles) del New York Times. La novela (ahora convertida en película) The Elegance of the Hedgehog, para mi hermana que no quiso escucharlo en mi audiolibro. Y Histories of Scientific Observation, para mí.
Apenas esta semana pude empezar a leerlo y estoy encantada. Fue editado por Lorraine Daston (co-autora de Wonders and the order of Nature, uno de mis libros favoritos de todos los tiempos) y Elizabeth Lunbeck.
La primera sección, con tres capítulos, aborda la historia de la palabra, la idea y la actividad "observación". Empiezan en la Edad Media, donde prácticamente ni se menciona la palabra y la actividad está por ahí dentro de las muchas comprendidas en el vasto y vago término "experimentar". Y llegan al siglo XVIII, cuando las observaciones y los observadores ya tienen un lugar muy claro en el quehacer de la ciencia. El conjunto de los tres ensayos produce un panorama del desarrollo de esta actividad que ahora tomamos por hecho.
Te transcribo un párrafo del capítulo de Daston que me encantó:
Apenas esta semana pude empezar a leerlo y estoy encantada. Fue editado por Lorraine Daston (co-autora de Wonders and the order of Nature, uno de mis libros favoritos de todos los tiempos) y Elizabeth Lunbeck.
La primera sección, con tres capítulos, aborda la historia de la palabra, la idea y la actividad "observación". Empiezan en la Edad Media, donde prácticamente ni se menciona la palabra y la actividad está por ahí dentro de las muchas comprendidas en el vasto y vago término "experimentar". Y llegan al siglo XVIII, cuando las observaciones y los observadores ya tienen un lugar muy claro en el quehacer de la ciencia. El conjunto de los tres ensayos produce un panorama del desarrollo de esta actividad que ahora tomamos por hecho.
Te transcribo un párrafo del capítulo de Daston que me encantó:
How did the term "observation" broaden its meaning and significance to become an essential aspect of both the theory and practice of natural knowledge by the late seventeenth century? The obverse of this question is how the widely diffused, all-purpose word "experiment" during the same period narrowed its scope to denote a carefully designed human intervention into the ordinary course of nature.
lunes, 15 de agosto de 2011
¡Se abrió!
Volví a ofrecer mi curso de ciencia ficción en la Facultad de Ciencias y esta vez ¡se abrió! Hasta el momento tengo 7 inscritos y 2 oyentes, pero al parecer el jueves -que comenzamos- vendrán unos cuantos más.
Te pongo el programa del curso para que veas de qué va:
Clase 1 Los primeros hombres en la luna, Wells
Clase 2 Siglo XIX (capítulo Fayter)
Clase 3 Las sirenas de Titán, Kurt Vonnegut
Clase 4 Siglo XX (capítulo Steinmüller)
Clase 5 Ciberiada, Stanislav Lem
Clase 6 Imagen del científico (artículo Haynes)
Clase 7 Crónicas marcianas, Ray Bradbury
Clase 8 A la luz de la bomba (capítulos Boyer)
Clase 9 La amenaza de Andrómeda, Michael Crichton
Clase 10 Microbios del espacio (artículo Wolfe)
Clase 11 Presentación de anteproyecto
Clase 12 Cómics (que cada quién traiga, yo: Farenheit 451)
Clase 13 Superhéroes (artículo Locke)
Clase 14 Blade Runner, Ridley Scott
Clase 15 Apropiación (artículo Milburn 2010)
Suscribirse a:
Entradas (Atom)